Suministros Hipérbole Material de Oficina: Mandalas para Relajarse

Mandalas y Lapices y rotuladores de colores.

Iniciarte en el camino de la relajación

¿Estáis preparados para relajaros? Te contamos cuáles son los lapices y rotuladores que necesitáis para que pintéis vuestros mándalas. Una técnica que cada vez gana más adeptos por su efecto relajante y creativo. Relájate, tómate tu tiempo pintando y bájate del mundo por unos instantes.

La palabra Mandala significa pensamiento contenido dentro de un círculo. Se trata de unos dibujos con múltiples formas para rellenar de colores. En principio puede parecer un juego o pasatiempo infantil, pero va más allá: es considerado terapia para muchos psicólogos.

Os contamos cuales son algunos de los beneficios de colorear Mandalas:

Favorece la concentración, la capacidad de enfocar la mente.

Permite concentrarse en la parte más creativa de una misma.

Contribuye a desconectar de obligaciones, preocupaciones y a la relajación, ya que es un momento para encontrarse con una misma y dedicarse a una misma. Si eres una de esas personas a las que les cuesta encontrar un momento para sí misma, esta es una actividad ideal.

Activa los dos hemisferios del cerebro, equilibra el modo de pensamiento, las actividades mentales y las habilidades que se asocian con cada uno de los hemisferios. En un mismo Mandala hay figuras geométricas que son captadas por el hemisferio izquierdo (lado lógico) y colores y dibujos que lo son por el hemisferio derecho (lado creativo).

Al estimular el lado derecho del cerebro (lado lógico, mental, científico), se liberan endorfinas y se produce una gran sensación de placer y bienestar.

El colorear Mandalas ayuda a canalizar el estres, la ira, restaurar la tranquilidad y alcanzar un estado muy similar al que se logra a través de la meditación “mente en blanco”, con todos los beneficios que ello implica.

Ayuda a lograr la flexibilidad entre el pensamiento y la acción.

Hace volver a la niñez: El colorear hace que se realice un viaje hacia atrás en el tiempo y te vuelvas a conectar con la niña que fuiste, que aún está allí latente.